lunes, 1 de agosto de 2011

OBSERVACION DEL 30 DE JULIO

Tras la convocatoria de rigor nos esperaba una nueva jornada de observación.
A las 21:30 llegó un grupo que venía de Madrid y que sabía de nosotros gracias al foro de Astrofácil.
Yo (Jorge) llegué corre que te corre a las 21:45 y todos estaban aguardando la llegada de alguien de AAMeR.
Tras las presentaciones habituales nos apresuramos a descargar los coches y empezar el montaje de los telescopios antes de que anocheciera por completo.
Se montaron tres equipos, un Skywatcher Newton de 5 pulgadas, un Meade LX200 de 8 y un Skywatcher ED80 sobre una impresionante montura EQ6. El montaje del newton era un espectáculo por la gente que lo rodeaba. A la vista de los otros equipos, los amigos empezaron a hacer bromas acerca de lo pequeño que era, etc, etc.
La noche había caído.
Se veía claramente la luz de Madrid porque había nubes bajas, también la zona sobre Manzanares el Real y Soto era algo molesta por la cantidad de luz irradiada hacia el cielo.
Pasado un ratillo llegó, Pablo, un chavalín que acompañado de su padre siempre disfruta mirando a través del telescopio y haciendo preguntas que le rondan por la cabeza. La noche fue mejorando hasta quedarse un cielo espectacular en el que podíamos distinguir la Vía Láctea, sin nubes y con mucha menos contaminción lumínica.
Entre lo mejor de la noche, como en tantas otras ocasiones, las expresiones de la gente que nunca había mirado a través de un telescopio y descubrir que aspecto tiene una nebulosa o un cúmulo globular. También les gustó mucho Saturno aunque la visión no era muy buena ya que subía mucha radiación calórica desde el suelo y el planeta se encontraba bajo a primera hora de la noche por lo que las turbulencias eran terribles.
También quedaron sorprendidos con la espectacularidad de M13 a través del Meade pero al César lo que es del César, es decir, cada abertura y distancia focal nos permitirá apreciar diferentes detalles así que había que tener en cuenta este pequeño detalle en la comparación que hacían los espectadores.
A pesar de ser final de junio el ambiente estaba fresco y la inexperiencia de los “novatos” les empezó a pasar factura con la sensación térmica por lo que replegaron velas y nos despedimos. Destacamos la visión del cometa C/2009 P1 Garradd, muy cercano a M15 (a poco más de 2º) y que pudimos comparar con él. El cometa era un objeto más compacto y nebuloso. Rondaba según estimaciones la 8ª magnitud. Otro objeto que nos hizo disfrutar mucho fue la nebulosa Omega (M17) en la constelación de Sagitario. Nacho estaba encantado con su aspecto tridimensional.
Ya empezaba a ser tarde y para delicia de los que seguimos allí, pudimos cazar a Vesta, el asteroide, el cual me sorprendió por su fuerte brillo de un color anaranjado muy característico. Según Starry Night su magnitud rondaba la 5,3. Otro cazado de la noche fue Plutón, de magnitud 14 y al que pudimos situar cerca de Gamma Sagitarii. Nos servimos de un asterismo de 6 estrellas (parecido a la ficha del domino) para confirmar que lo que veíamos era Plutón y no otra estrella. En aquel momento Nacho y yo decidimos que para nuestra Agrupación seguirá siendo planeta. Palín (de Astrofácil) empezó a recoger porque se había quedado sin baterías y fue en ese momento cuando el resto nos batimos en retirada.
Una noche francamente agradable y con objetos muy curiosos que nunca habíamos visto. Por mi parte puedo decir que la recordaré durante mucho tiempo.
Jorge